Uno de los
momentos más peculiares del ejercicio de nuestra profesión es el momento del
cobro de los honorarios. Todos los abogados tenemos multitud de anécdotas sobre
este tema, pero … de eso nos ocuparemos en otra ocasión. Hoy vamos a dedicar
esta entrada a exponer cómo el pago de la minuta de nuestros honorarios se
puede, de algún modo, endulzar.
Y es que
muchos clientes no conocen la posibilidad de deducir la minuta de honorarios
del letrado (o del procurador) en concepto de gastos de defensa en el Impuesto sobre
la Renta de las Personas Físicas.